Empresario EE.UU. pide no escuchar a Chávez
Advierte contra el proyecto de Alba Petróleos
Lo que no toman en cuenta los comunistas, resultado de su ignorancia, es que de cada diez empresas que se fundan en el mundo, apenas dos sobreviven más de un año. En otros términos, si los rojos piensan que con dinero sacado a la fuerza (los flamantes impuestos) van a crear empleo nuevo, les tenemos una muy mala noticia: lo que hagan, fuera de construir carreteras y ejecutar obras, irá al fracaso, amén de que ya hay empresas que hacen carreteras y cuyo personal quedaría cesante. Un empleo incierto que se genera y uno estable hasta ese momento que desaparecería. Suma cero.
Cuidemos todos los empleos existentes
La regla en El Salvador es que cada nuevo empleo en el sector formal cuesta varios cientos de millones de dólares de inversión, lo que no es el caso del empleo en las Mypes. Para que un grupo invierta esa clase de dinero, debe confiar en la seguridad jurídica prevalente, en las buenas posibilidades de obtener un retorno adecuado al capital, en el futuro de un país. Y muy poco de eso ofrece un régimen que de entrada acusa de "privilegiados" a los empresarios en ejercicio; si los rojos piensan en tal manera de los que vienen trabajando en su país…
Hay otro factor importante en esto del empleo: las empresas no vienen "llave en mano", sino que un visionario o un grupo tiene que armar el conjunto de ideas, financiamientos, tecnologías, programas y rutas que en un tiempo se van a convertir en la empresa productiva y rentable a la que aspiran. Esa clase de personas no existe ni entre los arrimados del candidato ni en las filas comunistas; de dónde van a sacar los talentos para dar trabajo es la interrogante que tiene una sola respuesta: vea el público el desastre cubano y el progresivo colapso "bolivariano" para anticipar lo negro que sería el futuro de El Salvador.
La situación mundial está demasiado convulsa como para que un partido esté planificando agresiones al empleo existente sin capacidad alguna para generar nuevas plazas de trabajo.
El Fiscal General de Colombia, Mario Iguarán, aseguró que la institución sigue en el proceso de verificación de la información contenida en las computadoras portátiles del abatido Raúl Reyes que involucra a José Luis Merino ("Ramiro") y a otros del FMLN con las FARC.
http://www.elsalvador.com/mwedh/nota/nota_completa.asp?idCat=6351&idArt=2746785
Un nuevo nombre ha surgido como posible candidato a diputado para el departamento de Usulután, ya que una parte de la ortodoxa del FMLN, entre ellos José Luis Merino, está pujando porque se incluya a Rafael Benavides como primer candidato.
Según una fuente que pidió el anonimato, Benavides —quien ha sido mencionado en los correos de “Raúl Reyes”, segundo al mando de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia— podría ocupar la primera diputación por Usulután.
Esta vacante la dejará Walter Durán, quien ya no podrá optar a un período más en la Asamblea, ya que los estatutos del FMLN se lo impiden.
La Comisión Política también baraja el nombre de Silvia de Hándal, esposa de un pariente de Schafik Hándal, como candidata a diputada en Usulután. Sin embargo, este posicionamiento significaría desbancar a Herbert Amaya al tercer puesto.
Luz verde
Además, hay algunos diputados suplentes que han salido muy bien evaluados por la comisión política y por sus colegas, por lo que sus nombres se barajan para subir a propietarios o al menos para ir en una posición segura como suplentes.Ante esa secuencia de salidas abruptas y fallidas, muchos otros, que comparten la aplicación de ideas más cercanas con las libertades democráticas y a la socialdemocracia, decidieron quedarse y librar la pelea desde adentro.
Ese grupo decidió guardar un silencio sigiloso. Comenzó a nacer con ese estilo desde aquellas elecciones internas cuyos competidores fueron Oscar Ortiz y Schafik Hándal, en el que surgió como ganador el viejo dirigente comunista. Un resultado que provocó rumores de presión y negociación política forzada.
Hay muchos socialdemócratas en el FMLN, algunos sin saberlo. Esperan callados que algo pase para avanzar en la toma de mejores posiciones en el poder interno.
El grupo socialdemócrata más consolidado es el del departamento de La Libertad.
En los municipios que gobierna no sólo están presentes dos de los alcaldes más exitosos del FMLN, el de Quezaltepeque y Santa Tecla, sino el caudal de votos que le aportan al partido de izquierda en cada elección, superado sólo por San Salvador. Otros miembros del FMLN trabajan en el silencio, sin adherirse más que a aquellas posturas que son inevitables para un partido de izquierda, lo demás se lo dejan al tiempo. Pero conspiran y opinan en los pasillos, en sus curules, en sus casas, como en los viejos tiempos del estalinismo.
Esos movimientos y debates internos le han dado vida a un lobby especial, el de los conspiradores que no dejaron el arca abierta para los ortodoxos.
Los que se fueron antes y fallaron saben bien que si en un momento político especial estos grupos que se han quedado logran consolidar sus posiciones, sería factible una negociación para su retorno o para consolidar una idea común en torno a la socialdemocracia.
Esta situación provocó una crisis mayor en el FMLN, el mito de los ortodoxos ha comenzado a derrumbarse, muy lenta y silenciosamente. No existe ningún grupo granítico de ortodoxos, existen intereses de grupo muy bien delineados que ocupan esas ideas para granjearse ventajas.
La vieja guardia de los comunistas, los que estuvieron más cercanos con la ética política de Hándal siguen en el FMLN como monjes budistas, realizando un trabajo de conciencia que no tiene mucho que ver con los procesos electorales, sus ideas no tienen eco en las estructuras de dirección del partido, sus métodos están más alineados con la pureza de las ideas, por ello han perdido poder, no lo tienen en realidad.
El otro grupo es el de la generación intermedia, la que se desarrolló durante la guerra, alineados a un discurso de corte ortodoxo, pero que en el fondo no se expresa a la hora de los manejos cotidianos. Lo que quieren es consolidar el poder generacional que, a su juicio, les corresponde por herencia y sudada de camiseta.
El mito mayor es el del grupo de Ramiro Vásquez, lejos de lo que muchos creen él no representa ni a todos los comunistas, menos a muchos otros grupos que están dentro del FMLN, y menos aún a los ortodoxos, la institución más difusa con la que pueden contar en este momento.
El factor Funes.
A esa realidad latente de atomización de las realidades ortodoxas del FMLN, hay que agregarle la llegada de Mauricio Funes y "el partido de los blancos."